Toallas nuevas: como lograr su máxima capacidad de absorbencia

Toallas nuevas: como lograr su máxima capacidad de absorbencia

¡Llegaron mis toallas nuevas!

Primero que nada, felicidades. Tener toallas nuevas siempre es una pequeña fiesta. Esperamos que las disfrutes.

Tenemos algunas recomendaciones que podrían interesarte.

  1. Se aconseja lavar las toallas nuevas con agua caliente y sin suavizante para remover cualquier tipo de acabado derivado del proceso normal de fabricación. Lavarlas por separado es lo mejor, ya que pueden decolorar además de dejar pelusa residual.
  2. Puedes agregar ½ taza de bicarbonato de sodio al ciclo de lavado, junto con el detergente, y  agregar ½ taza de vinagre blanco en el ciclo de enjuague. Diluye el vinagre, pues puede decolorar las toallas. Si tu lavadora tiene depósito para suavizante, puedes agregar el vinagre en él.
    • Toma nota: estos son remedios caseros conocidos de antiguo. Cuando el vinagre (un ácido) o el bicarbonato de sodio (un alcalino) se disocian, los átomos se liberan para recombinarse con minerales, sales u otros químicos acumulados de forma que son más fácilmente eliminados de los tejidos y arrastrados por medio del agua.
  3. No uses suavizante. Los suavizantes de telas cubren la superficie de los tejidos con una capa delgada de químicos (aceites) que le confieren a las telas un acabado hidrófugo (el aceite y el agua no se mezclan, quizá lo recuerdes de tus clases de química).
  4. No uses cloro. Destruye los tejidos.
  5. Usa la secadora de ropa. Si tienes la suerte de contar con este artilugio en tu hogar, puedes usarlo para secar tus toallas: las dejará suaves y esponjosas al tiempo que ayudará a disminuir rápidamente el desprendimiento de pelusa, propio del rizo de algodón cuando es nuevo. Si esto te produce pesar ecológico, puedes ponerlas a secar al sol y meterlas a la secadora para un secado corto que las esponje y suavice.
  6. Ahora tienes en tus manos unas toallas que son mucho más absorbentes y confortables.

Puede ser que requieras repetir dos o tres veces este proceso antes de tus toallas alcancen su máximo poder de absorbencia. El algodón se vuelve más absorbente con el uso.